Thursday, March 9, 2017

El color de la Penicilina: Chispa

Habían pasado mas de seis desde el accidente,  Mauricio y yo estábamos en ese pequeño momento de transición de adaptarnos el uno al otro, todo parecía estar bien desde aquel dia que expresó que el sería mi guía en la vida. La realidad era que no  me sentía tan util vagando en la casa sin saber que hacer,  la música no era lo mío,  quería bailar,  operar,  estar con mis pacientes, eso no me hacía más que suspirar de decepción,  no hallaba como sentirme mejor.

Nada estaba bien. Mi  cuerpo estaba sanando, no habia mas yeso, no había grapas en mi cráneo, y ya tenía algo de cabello, mis cicatrices estaban desvaneciendose poco a poco,  pero esa  chispa de vida en mi no estaba, no había luz ni nada que me hiciera tener ganas de vivir nuevamente. Yo ya no sentía la alegría de vivir.

Yo estaba limitando mucho a Mauricio,  sus pocos descansos era estar conmigo en casa,  no salíamos por decisión mía,  prefería mil veces que me dijera que regresaba con Claudia y no  sentir que era lástima la que me tenía.

Dulce amor,
Dulce vida,
Dulce muerte
Mi consentida,
Llevadme lejos
Llevadme cerca
Dulce muerte
Mi consentida
Os encargo la luz de mi vida
Apagadla, calladla
La luz de vida
Dulce muerte
Mi consentida